Estudiantes empató 1-1 ante Independiente Rivadavia
Con goles de José Sosa y Franco Romero, ambos de penal por brazos en el área, el Pincha no pasó de la paridad ante la Lepra en UNO.
Estudiantes tenía prácticamente todo servido para que sus hinchas iniciaran de la mejor manera el final de esta semana: se encontró con un penal por una mano infantil en el inicio del partido, manejaba la pelota, se aprovechaba de las fallas en el juego del 19° del campeonato (que hubiera sufrido con el descenso de no ser por la última decisión de AFA)... Pero una jugada desafortunada que terminó de la misma forma de la que se había puesto en ventaja le desmoronó todos los planes. Y a partir de ahí, fueron 45’ en los que reinaron las imprecisiones.
Porque al Pincha, que le costaba generar y tener presencia en el área para terminar las jugadas (Eduardo Domínguez alineó un equipo sin #9), tampoco le sentó bien el cambio de esquema del segundo tiempo para pasar a jugar con dos centrodelanteros (Carrillo-Giménez) más un extremo (Manyoma): más allá de algún desequilibrio individual que alteró el orden defensivo de Independiente Rivadavia, le costó sumar volumen de fútbol por la falta de asociaciones que tuvo en la mitad de la cancha.
Solo el Principito Sosa, a través de sus pases precisos y su claridad conceptual, intentó algo diferente al resto, aunque por momentos pareció hablar otro idioma: su equipo, en general, no pudo levantar vuelo para hacerle daño a un rival que permaneció bien parado, más allá de conceder espacios en algún momento. Manyoma insistió y los laterales se proyectaron, pero los centros -potenciados al tener doble #9- terminaron siendo despejados en su totalidad por Burgos y Studer.